Laura.

Sí, puede que sea rara, y quizá sea eso lo que me hace especial. Me gusta cantar aunque esté triste, bailar, me gustan las personas que me hacen reír, y la sinceridad. Odio los días de lluvia, me encanta el sol, excepto cuando me da directamente en los ojos, y adoro el verano, aunque no me guste como me sienta el bikini. Además odio los sabelotodo y la prepotencia, la gente que se cree superior, aunque sinceramente, a veces parezca una de ellos.
Me encanta comer, cocinar, hacer mezclas entre comidas y experimentar con ellas. Me gusta comportarme como una niña, y que entren en mi juego. Me gusta la sencillez, y que me entiendan con una mirada, me gusta hablar, pero las cosas importantes prefiero expresarlas con pocas palabras. Al mismo tiempo me encantan los detalles, y pienso que la cosa mas nímia puede llegar a ser un mundo, o incluso más. Puedo llegar a ser pesada, incluso cargante, pero me gusta que sepan soportarme. Odio que me vean llorar, excepto si se trata de mi almohada, odio la pregunta ¿estás bien? cuando saben que no lo estás. En lugar de eso, me encantaría recibir el apoyo de una persona con un simple chiste malo, que me hiciera reír en lugar de pensar en mis problemas.
Soy perezosa, pero me aburre no hacer nada, sí, es cierto, no paro quieta, y como demasiado. Odio la gente que dice te quiero y no te lo demuestra, que sonríe, pero no siente felicidad.
¿Y qué? las personas que me quieren, me quieren de verdad, con mis virtudes, y valorando mis defectos, y es que no soy normal, y me enorgullezco de ello.