domingo, 16 de enero de 2011
¿Me elevas a lo más alto para después dejarme caer?
Ese fenómeno tan maravilloso que trae cola, que hace que los libros se agoten,
que se vendan miles de entradas, que haga a todos soñar con vivir esa historia.
Hace unos días vi la película, hace mucho, pensé comprarme el libro, pero no tenía tiempo y no lo he hecho, aun así, pienso hacerlo próximamente.
Después de todo, pienso,¿ realmente es tan bueno estar a 3 metros sobre el cielo?
Sí, estar allí debe ser genial, pero, hace ya mucho tiempo, un gran científico dijo, "Todo lo que sube, baja"
Entonces, qué grande debe ser la caída desde 3 metros sobre el cielo ¿no?
Una vez me dijeron que al ir a un sitio no sólo debes centrarte en llegar, sino en disfrutar del camino, entonces, ¿no pienso qué haré cuando llegué allí?
Está muy bien disfrutar el presente y no querer pensar en el futuro, pero...
¿merece la pena realmente estar a 3 metros sobre el cielo? Nada es eterno, y nuestra estancia allí tampoco lo será, igual que al final no acaba siéndolo para los protagonistas en los libros de Moccia.
Por tanto, ¿me arriesgo a tomar esa subida y situarme a 3 metros sobre el cielo? o, ¿ me dejo guiar por la lógica pensando en la consiguiente caída y no me arriesgo?
Tener miedo no es tan malo a veces, aunque siempre hay que saber vencerlo.
¿Tú te arriesgarías aunque tan solo puede haber un máximo de un 50%, correspondiente a tu parte, que te diga que va a salir bien?
Supongo que lo mejor será arriesgarse pero sin subir tan alto.
¿A 3 metros sobre el cielo?
No, gracias. Prefiero estar con los pies en la tierra.
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